S zapatillas que alguien había descuidado y les prendieron fuego y con la ceniza se pintaron la cara, Berit una esvástica sobre la ceja. Oigo a algunos disculparse públicamente y pienso que la instancia del perdón se está convirtiendo en un vertedero más.

De nada sirvió ver juntos centellas. Que son de las promesas mausoleos,. Y de ilusiones balas de fusil. Tanto da el tono áureo como el gris. En el ritual del terso amor eterno. De las perdices degusté el veneno. No supe numerar aquellos pétalos. Y eludí un no me quiere para mí. Tanto da el abrojo como el jazmín. Te fuiste, sí, te fuiste.