Un punto de vista algo diferente. Sabéis esas veces en las que recuperas viejas amistades después de mucho tiempo y te das cuenta de que no ha cambiado absolutamente nada? Pues eso me ha pasado a mí. Hoy quiero hablaros de él. O bueno, más bien de ellos. Hace seis años que vivo fuera de mi casa, y cinco que tengo un mejor amigo por encima de todos los demás. Pongamos que hablo de S.

El blog de experiencias comunes pero especiales. Sal un martes a tomar cervezas hasta que se haga de noche. No tengas miedo a que se te pase el tiempo volando. No sepas en que día vives. Disfruta de cada momento, porque no vuelven. Piensa qué quieres en esta vida. Encuentra la manera de alcanzarlo y ve a por ello. No pienses en el pasado, lo que pasó pasado está. No pienses demasiado en el futuro, pero míralo de frente.

Cuando esperas que no sea un adiós. Entre el si y el no. Cuánto tiempo, nunca creí que estaríamos tanto tiempo sin saber el uno del otro cuando solíamos saber incluso a que hora nos acostábamos y despertábamos. Hablábamos las 24 horas del día no hacía falta excusas, nunca se terminaban los temas de conversación. De verdad, creí que encontrarías la forma de poder hablar conmigo. O que algún día fuéramos capaces de mirarnos a los ojos. Y ahora, miro hacia atrás y veo c uánto han cambiado las cosas,.

Hay dos momentos en que sientes que no te quedan palabras. Uno es cuando te decepcionas y sientes un dolor tan profundo que no hay palabras con las que poderlo reflejar. Sabes cuándo sientes que quieres tanto a una persona que al pensar en esta, sonríes y te quedas en blanco? Diciembre 23, 2015. La esencia de la vida.

El lugar donde lo posible y lo imposible se cruzan. Me desperté con taquicardia, empapada en sudor, medio mareada, asustada y con el rimel corrido. Sin darme cuenta que no estaba ni en mi cama ni en mi casa. Hacía frío y afuera diluviaba, serían las cinco de la mañana y mi intuición me decía que tenía que irme de ahí, de esa habitación. Llegué a la Volvo, y contemple el mar que estaba igual de revuelto que yo. Sin embargo, algo me decía que no, que estaba viciada a qu.