28 de julio de 2015. Este post iba a publicarse dentro de una semana. El día en que inicio mis vacaciones. Hasta que no llegué a esta casa nunca había utilizado esta expresión, y no sé cómo he podido vivir tantos años prescindiendo de ella. 8220; desaparecer del mapa? Pero de qué estáis hablando? No iréis a hacer alguna tontería? Categórico.

Aunque todo esté perdido, siempre queda molestar. Tras hacer el esfuerzo casi sobrehumano de despegar los párpados, su siguiente acto fue contra el despertador. Lo estampó contra la pared como si tuviera una cantidad inagotable de despertadores guardados en el cajón de la mesilla de noche. Por si os lo preguntáis, ha sido un gesto involuntario, una reacción primaria ante algo desagradable.

Entre el si y el no. A veces la amistad también duele. Lo fácil es encontrarse con las personas equivocadas, lo complicado es elegir a los indicados. En verdad no se trata de gente equivocada o correcta, se trata de gente con la que puedes ser tú mismo sin ningún miedo. Esa gente para ti va a valer oro. Para encontrarme a mi, debía perderte a ti.

Esa tarde, Emily y sus amigas habían quedado. Querían romper un poco con sus habituales viernes tópicos y normales. Era un día gris, pero eso a ellas no le importaban. Tan gris que solo les permitió disfrutar por esas calles, lo mínimo. De repente se puso a llover y tuvieron que meterse en una cafetería hasta que la lluvia que les había irrumpido su tarde, parase. Tanta cafetería moderna y grande, para luego no indicar bien la mierda los baños.