Un poco de aquí, un poco de allá, un poco de mi, un poco de ti. Éste debe cubrir al menos un tercio de la distancia que hay entre la mesa y el suelo.

Memorias que no se extinguen. Pienso, escribo y luego existo. Cuando me vuelva a enamorar. Cuando me vuelva a enamorar, quiero reír sin parar; quiero volver a ser una niña; quiero. Confiar sin pensar que me van a fallar; quiero sentir que soy yo a la que más quiere;. Quiero pasar los mejores y los peores días a su lado; quiero pelear sin razón para. Nuestro pequeño o grande tiempo juntos; quiero ser la mujer de sus.

Porque quiere y se deshace con cualquier ilusión. Son letras pérdidas en ritmos cadenciosos, en sombras de sangre, diálogos de silencios. Son las memorias de mis ancestros, el canto de mi madre, la nostalgia de mi padre, la imagen de mi abuelo. Son mis amigos dispersos, cada quien en su mundo, todos disueltos en trabas de lápices de suela. En resortes con destino, en vaivenes del camino.