El gris de los colores. Y una firmeza dulce que reconforta. Que a mí se me aparecen. Que regresan y se van,. Festivos en su ignorancia férrea,. Por efímeros preámbulos de jornadas laborales,. Por música encapsulada tras los auriculares,. Yo, en cambio,.

El rincón de José Carlos Valverde. Las cuatro caras de un círculo. La desesperación de las mariposas. El papel del corrector, consejos y utilidades. Colaboraciones literarias Cadena Ser Radio Morón. El rincón de José Carlos Valverde. Escritores, Correctores, autores, lectores. Las cuatro caras de un círculo. La desesperación de las mariposas. El papel del corrector, consejos y utilidades.

Un nuevo albor nacía calmo y silencioso,. Y aún antes de esos, otros que albergaban visiones,. Aquellos de las grandes esperanzas escritas y selladas. Abrazado a aquel retiro emocional forzado,. Perdido en sus planes de vida, ahora ya quebrados;. Se convirtió entonces en náufrago de sus sueños,. Esos que un día dibujó en nubes de ilusión compartida. El ansia de sobreponerse a aquel tormento,.

El poeta tampoco soy yo Blog de César Sánchez Azueta. El poeta tampoco soy yo. Blog de César Sánchez Azueta. Besadores de labio propio,. Cangrejos con nido en el aire,. Rifles huérfanos en cajas nuevas,. Chinches de ratas cloaqueras,. Lenguas en oídos empedrados,. Juicios bienhechores de las plantas,. Recuerdo por ejemplo a Isaías,. Nunca hizo una mierda,. Cada vez rejuvenecía más anciano. Nadando en el betún de Judea,. Con esos ojos que se abren como arpas,. Con el bozal en los nudillos.

Las cosas que solía contarte. Un átomo de felicidad olvidada,. Envuelto en látex para llevar,. El crepúsculo de un cenicero de invierno,. Hasta las huellas que tus manos. Dejaron en mi piel,. Es gris como la nieve que abarca este vacío,. De la historia de nuestras vidas,. Decidir después de todo,. Decidir el licor de las botellas medio llenas,.

Pensamientos del Príncipe de la tinta, un loco en un mundo de cuerdos y cuerdas. Dos en latín tardío las. Está última tiene una traducción anónima al español antiguo como. Espero que no Pero Quién? Si no.

Terminó arrepintiéndose de su decisión como siempre hacía. Terminó culpándose por no poder ser lo que ella quería. Y es que no era más que pequeños retazos de un inexperto dibujante que trataba de hilar sus días con inacabadas emociones. No era más que el descolorido perfume de una triste ausencia. Descubrí un nuevo mundo entre sus brazos.

Encadenando palabras que te traigan luz. El susurro a tu memoria. El eco de tu voz. Había una vez un país llamado España. Pasa, pisa y pisada. Un castillo entre las nubes. Tres disparos, un fusil.